Descripción

Aquí sabemos de tazas, de cafés y de infusiones. Pero de marketing es un hecho que no sabemos tanto. Esto es así. No hay que avergonzarse.

Entiendo que lo lógico aquí, es pintarte una sugerente escena en la que tu pareja y tú estáis disfrutando de vuestra afición por el camper en un bonito lugar tomando un desayuno en estas tazas… Pero es que no me sale. Porque la escena que yo tengo en la cabeza, nace de mi propia experiencia y es otra.

Mira. Si haces como yo y te pones mala cada vez que tienes un día libre, y encima eres una chica camper y te pilla el trancazo en medio del bosque, en tu furgo, con tu pareja, teniendo que usar papel de cocina hasta que sientes que tu nariz arde en llamas… Sí. Te recomiendo estas tazas.

Porque nosotras que sabemos lo que es eso, que podemos contar las vacaciones de verano, de semana santa o los puentes según resfriados, esguinces, contusiones, intoxicaciones alimentarias y etcétera etcétera, sabemos también que RENDIRSE NO ES UNA OPCIÓN.

Así que en vez de hablarte de esos idílicos desayunos, deja que te diga que si acabas buscando una farmacia en un pueblo remoto para encontrar un medicamento sin receta que te ayude a tirar el resto del día, estas son tus tazas.

Porque esas pastillas del tamaño de tu cara, ganan mucho si las tomas en unas tazas de camping tan molonas. Y es que, oye, seamos sinceras. Si todo fuera tan idílico en nuestras vidas, nos daría igual tomar el desayuno en vasos de cartón. Las que vivimos en el mundo real, nos lo apañamos a base de detalles.

Mucha fuerza amiga!